Imperio Bizantino

Imperio Bizantino

El Imperio Bizantino fue el lado oriental que surgió de la división del Imperio Romano en el año 395, abarcando toda la Edad Media y el inicio del Renacimiento. Su duración superó por 1000 años la del Imperio Romano Occidental.

La capital del Imperio Bizantino fue Constantinopla, conocida inicialmente como Bizancio. Este imperio constituyó uno de los más importantes de la historia, supo desarrollarse como potencia mundial y transcendió en el tiempo.

Ubicación del Imperio

Se encontraba ubicado en toda la zona oriental de lo que era la Antigua Roma. Para el 550 d.C. ya el Imperio se había expandido y logró conquistar territorios que pertenecían al lado occidental.

Ubicación del Imperio Bizantino
Mapa del Imperio Bizantino

Con el paso del tiempo el Imperio Romano Oriental fue perdiendo poder, hasta que en 1453 el único territorio que le pertenecía era su capital Constantinopla. En la actualidad forma parte del territorio de Turquía y se le conoce como Estambul.

Historia del Imperio Bizantino

Origen

El origen del Imperio Bizantino se debió al crecimiento constante del Imperio Romano, potencia del viejo mundo. Fue el emperador Dioclenacio el que infunde la idea de dividir el imperio a fin de lograr mejor dominio del territorio.

El emperador Teodosio I insistió en reunificar las tierras, pero finalmente es él quien termina repartiéndolas entre sus dos hijos en el 395 d.C. Quedando el Imperio dividido en Oriental y Occidental. La parte oriental es entregada a su hijo Arcadio y es la que se convierte en el Imperio Bizantino.

El Imperio Occidental de Roma no soportó los constantes ataques germanos y desaparece en el 476 d.C. No sucede lo mismo con el de Oriente, que consigue perdurar hasta el 1453 d.C., cuando finalmente su capital es invadida por los Otomanos.

El término Imperio Bizantino no era el que usaban los habitantes para hacer referencia al mismo, sino que siempre lo llamaron Imperio Romano o Romania. La palabra bizantino es creada por la erudición ilustrada entre los siglos XVII y XVIII. 

Constantinopla

Cuando Teodosio divide el imperio, otorga Roma como capital del Imperio Occidental y Bizancio se convierte en la capital del Imperio Oriental. Después de la restauración de la ciudad por Constantino, este la denomina Nueva Roma. Pero el nombre no perdura en el tiempo y se le comienza a llamar Constantinopla.

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Bizancio fue fundada por el rey Bizas y había sido una colonia griega antigua. Se convirtió en una de las más pobladas ciudades del todo el mundo, gracias a su inmensa actividad económica y cultural. Su ubicación era estratégica, convirtiéndola en punto de tránsito y comercio entre la región europea y Asia Menor.

Nacimiento del Imperio Bizantino

Arcadio, el heredero de Teodosio I, luchó sin descanso por mantener controladas y seguras las fronteras del territorio oriental. Debido a los ataques bárbaros que acabaron con el Imperio Romano Occidental, Teodosio II (sucesor de Acadio), refuerza las murallas de Constantinopla. Este, la hizo casi inexpugnable y logro mantenerla a salvo durante el siglo V hasta el siglo XIII.

El imperio resistió varias invasiones, entre ellas la de los hunos o los Ostrogodos. Los godos terminaron con el Imperio del lado Occidental y fundaron el Imperio Germánico de Occidente. Pero esto no sucedió con el Imperio Oriental que se liberó de los ataques a los que había sido sometió.

El Imperio Bizantino de Justiniano (527-565)

Justiniano accede al trono en el 527 d.C., esta fue la etapa de mayor auge del Imperio. En el poder intentó poner en práctica la idea que llevaba formando a lo largo de toda su vida: Que solo debía existir un rey que ejerciera la autoridad política por todo el mundo cristiano.

Para unificar los reinos cristianos, se propone restablecer las fronteras del antiguo Imperio Romano. Después vuelca su esfuerzo por conquistar lo que en un tiempo fue el Imperio Occidental.

Pero todos sus sueños tuvieron un coste alto, las campañas en el lado Occidental y los espectáculos de entusiasmo, hicieron que las arcas del estado quedaran debilitadas. El Imperio cae en una profunda crisis económica que costó superar.

Justiniano buscó la manera de revitalizar la hacienda por medio de aplicar impuestos fuertes a los ciudadanos. Esto provocó revueltas que casi llevan al exilio al emperador. Además, la Peste que surge en el 534 d.C., complicó la situación económica y diezmó la población de la capital. Justiniano fallece en el 565 d.C. dando fin a la etapa más floreciente del Imperio.

El Imperio después de Justiniano

Los siglos que continuaron no fueron tan fáciles para el Imperio Romano Oriental. Fue época de dificultades en la que: El Islam estaba conquistando las regiones que poseían más recursos, los eslavos y búlgaros amenazaban el lado norte y al este luchaban con los persas. A todo esto se le sumaban las pugnas internas entre el poder religioso y el secular.

El sucesor de Justiniano fue Justino II, se trató de un emperador enfermizo y loco, no fue capaz de administrar y enfrentar las amenazas externas. Muere y deja el Imperio a Tiberio II, este último no tenía afán expansionista y no le importó que Italia quedara en manos de bárbaros o lombardos.

Comienza el declive del Imperio Bizantino

Los persas continuaban penetrando cada vez más por las provincias orientales. La amenaza después pasan a ser los árabes, quienes fueron un adversario más preparado y temido que los persas.

Los árabes ocuparon Siria, Africa del Norte y Palestina, mientras que los Visigodos poseían Hispania. Esto dejó al Imperio Romano Oriental reducido al sur de Italia, Grecia y Asia Menor.

En el siglo XI, los turcos se apoderan de Asia Menor y la situación se vuelve crítica para el Imperio Bizantino. Puede decirse que es en este momento que empieza el declive del mismo. Finalizando en 1453 cuando los Otomanos ocupan Constantinopla.

Organización Social

La organización social durante la época bizantina era una jerarquía que se organizaba de la siguiente forma:

Organización del Imperio Bizantino
  1. El Emperador y su familia en la cima.
  2. Le seguía la nobleza, formada por asesores del Emperador.
  3. Más abajo, el alto clero, privilegiado debido a su posición jerárquica.
  4. Continuaban los miembros de la élite. Compuesta por comerciantes, granjeros y dueños de los talleres artesanales.
  5. La capa media de la sociedad se formaba por el bajo clero, pequeños agricultores y los trabajadores de artesanía.
  6. La parte mayoritaria era la clase de los campesinos pobres que ganaban muy poco y pagaban impuestos altos.

Organización Política

La organización política era teocrática, donde el emperador era el delegado de Dios y tenía poder absoluto. Por lo que, además de ser jefe supremo administrativo y de la fuerza militar, tanto el cómo su familia se consideraban sagrados. El emperador contaba por su parte con funcionarios que pertenecían a la nobleza que estaban encargados de actividades administrativas y el control del Imperio.

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Cultura

La cultura bizantina aunque reflejaba influencias romanas, sufrió también influencia Helenística. El Imperio Romano de Oriente resultó en una mezcla de pueblos que, por 10 siglos supieron unir la cultura romana y griega. Convivieron diversas religiones, incluyendo la cristiana y otras paganas; y se mezclaron las costumbres occidentales con las orientales.

Hablaban inicialmente latín, pero después el griego era el idioma que se usaba oficialmente dentro del Imperio Bizantino. Pero los habitantes no dejaban de considerarse romanos, puesto que seguían siendo descendientes inmediatos de los Emperadores de Roma.

Religión

La religión tuvo un papel fundamental en el éxito que tuvo el Imperio Bizantino. A través de la religión se intentó la unificación de occidente y oriente para alcanzar el bienestar de la nación. La religión dominante era el cristianismo, tal como lo fue en el Imperio Romano.

Era elemental en la vida cotidiana de la población, como puede deducirse de las obras de arte de la época. El emperador se consideraba el exponente principal de la iglesia, era el jefe tanto del Estado como de la iglesia. Para la mayoría de los cristianos orientales se trataba de un líder espiritual.

Caída del Imperio Bizantino

El Imperio Bizantino sufre su caída cuando Constantinopla es invadida por el Imperio Otomano en 1453.

Con el Imperio Oriental sumido en una crisis social, llega el fin del largo periodo de dominio del Imperio Romano. Esto se tradujo en problemas para el cristianismo ya que, al entrar los trucos a Europa, ingresan nuevas religiones, ideologías y costumbres.

El 29 de mayo de 1453, es la fecha adoptada por la historia universal como la que marca el fin de la Edad Media en Europa, el comienzo de la Edad Moderna y el fin definitivo del Imperio Romano.

Bibliografía

  • Imperio bizantino. (2020, 10 de marzo). Wikipedia, La enciclopedia libre. Fecha de consulta: marzo 12, 2020 desde https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Imperio_bizantino&oldid=124170900.
  • Imperio Bizantino: historia resumida. (2020, 10 de febrero). Sobrehistoria.com Fecha de consulta: marzo 12, 2020 desde https://sobrehistoria.com/imperio-bizantino-resumen/.

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